La oración no es solamente una práctica religiosa.La oración es un fenómeno universal practicado portodos los pueblos y en todas las épocas de la historiahumana. La invocación de lo transcendente adopta unainagotable variedad de formas acordes a cada cultura ycada uno de sus miembros. La oración es el alimento delalma y la más íntima de las expresiones del espírituhumano. Juan XXIII decía «que un día sin oración escomo un día sin sol o un campo sin flores» y Santo Tomásdefinía la oración como «la elevación de la mente a Dios yla petición de todas las cosas convenientes». Orar o rezarno es un mero expresar los deseos que queremos que se cumplan a la deidad. El adagio reza que «la necesidad enseña a orar». Hay situaciones de emergencia, o in extremis, que nos invitan a un ejercicio muy valiente y de gran esfuerzo: orar.